fbpx

Opaca conflicto de la escuela Cuauhtémoc el logro del estudiante que pasó de nivel en la Olimpiada del Conocimiento Infantil

El problema que estalló en la escuela primaria Cuauhtémoc de Matamoros donde un grupo de padres de familia exigían la destitución de la directora del plantel por supuestos actos de corrupción en complicidad con la actual mesa directiva, opacó el logro del estudiante Rafael Mendoza, quien pasó a la siguiente etapa del concurso académico “Olimpiada del Conocimiento Infantil”.

El profesor Víctor Hugo Arellano Urbina, maestro frente a grupo del 6to grado “C”, explicó que el niño se preparó durante muchos días en materias como Español, Matemáticas, Ciencias Naturales, Geografía, y Educación Cívica y Ética, logrando obtener la puntuación más alta de su sector, lo que lo colocó entre los mejores de Matamoros para representar a la ciudad.

El docente se dijo satisfecho del resultado que obtuvo el menor, ya que el esfuerzo implícito en él lo puede llevar a viajar hasta la Ciudad De México (CDMX) para visitar y saludar de mano al presidente de la República Andrés Manuel López obrador, esto como una distinción a la dedicación y entereza que ponen los niños en su aprendizaje.

“Esto es un exámen que año tras año se viene dando en las escuelas de Tamaulipas y los niños más destacados van a otra etapa en Ciudad Victoria a realizar otro examen para ver si pueden calificar a la tercera etapa que es ir a visitar al presidente, saludarlo. En el examen se les hacen preguntas de conocimiento general, todo lo que han visto en el año escolar”, dijo.

Por su parte, el pequeño Rafael, hijo del señor Juan Carlos y la señora Natalia se dijo contento de haber pasado a la siguiente etapa, donde además de representar a la colonia Palo Verde, también busca poner en alto el nombre de Matamoros pues la emoción de conocer al presidente AMLO lo motiva para dar lo mejor de sí en el concurso que se estará llevando a cabo en los próximos días.  

Cabe destacar que durante la revuelta de padres de familia en el plantel, las madres inconformes colocaron sus pancartas de molestia sobre la lona que se colocó en el portón de la escuela donde estaba plasmada la fotografía del niño junto a su maestro en un símbolo de apoyo y orgullo para la escuela.