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Por semana se cometen un promedio de treinta delitos sexuales en Tamaulipas: SSP

Tamaulipas ya suma hasta el mes de septiembre un total de 1,169 delitos sexuales, lo que significa que por semana se cometen un promedio de treinta.

Al mismo periodo del año pasado, se tenía un registro de 1,081 casos, es decir, 88 menos que en 2022 y el incremento fue de 8.1%, detalló el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Dentro de los delitos sexuales, el de mayor incidencia este año ha sido el abuso sexual con 560 denuncias; 25 más que en 2021. El ilícito representa más de la mitad de esta clasificación delictiva.

La estadística en cuestión se basa en el número de carpetas de investigación abiertas por la Fiscalía General de Justicia del Estado a través de sus unidades distribuidas en la entidad.

Después está la violación simple, que ya acumula 420 denuncias ante el ministerio público; a septiembre de 2021 iban 401.

El acoso sexual tiene 80 carpetas de investigación abiertas, mientras el año pasado para estas mismas fechas el acumulado era de 73. A su vez, el hostigamiento sexual pasó de 23 a 29 en el lapso referido.

De violación equiparada el año pasado no se recibieron denuncias, pero ahora hasta septiembre se tiene una. Finalmente, hay un apartado denominado “Otros delitos que atentan contra la libertad y la seguridad sexual”, que transitó de 49 a 79.

Esto dice la ley

El Código Penal de Tamaulipas, indica que comete abuso sexual quien realice en una persona, sin su consentimiento, actos como tocamientos o manoseos corporales o se obligue a la víctima a observar un acto sexual o a exhibir su cuerpo.

Incurre en acoso sexual, quien, con respecto a una persona con la que no exista relación de subordinación, lleve a cabo conductas verbales, físicas o ambas, relacionadas con la sexualidad, que la pongan en riesgo o la dejen en estado de indefensión.

El hostigamiento sexual, lo realiza quien, valiéndose de una posición jerárquica laboral, docente, doméstica o cualquiera que genere subordinación, asedie a otra persona, emitiéndole propuestas y utilice lenguaje lascivo con este fin o le solicite ejecutar cualquier acto de naturaleza sexual.

Fuente: Milenio