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SITIO DE JERICÓ EN LA PARROQUIA DE SAN JOSÉ

Reynosa Unida en Oración a través de la Semana Eucarística
Con el propósito de contribuir a la paz, la tranquilidad y la estabilidad de los habitantes de esta ciudad, el Estado y el país, un nutrido grupo de católicos guiados por autoridades eclesiásticas llevan a diario intensas jornadas de oración tanto en el transcurso de la mañana como en horas de la tarde, la noche y en horas de la madrugada en la Parroquia San José.
“Reynosa Unida en Oración” es el lema de esta actividad, cuyos trabajos se iniciaron el día 6 de marzo y se llevarán a cabo hasta el día 13 de marzo.
El llamado “Sitio de Jericó” se inició el viernes 6 a las 7 horas pm con una misa, y al término se desarrolló la Hora Santa y procesión con el Santísimo.
Las oraciones del “Sitio de Jericó” consisten en adoración nocturna del primer minuto del día hasta las 6 de la madrugada, a puerta cerrada; rosarios de sanación y coronilla de la misericordia, el Santo Rosario Mariano  entre otras actividades con el ánimo de coadyuvar a lograr la anhelada paz de Reynosa, Tamaulipas y el país.
Además en los tradicionales sitios de Jericó como el que se lleva a cabo en la Parroquia de San José la comunidad parroquial se integra y las experiencias espirituales son espléndidas y muchísimas personas acuden a la confesión, informó el Pbro. J. Aristeo Salas uvalcaba.
Como se narra en el pasaje de la Biblia “Jericó estaba fuertemente custodiada contra los hijos de Israel; nadie salía ni entraba en ella”.
Por ello Dios le pidió a Josué que fuera circundada la ciudad durante 6 días y que en el séptimo día los sacerdotes tocaran las trompetas. “Cuando suene el cuerno de carnero y vosotros hagáis el sonar de las trompetas, todo el pueblo levantará un fuerte grito de guerra. Entonces los muros de la ciudad se derrumbarán y el pueblo subirá, cada uno frente a sí”, le expresó a Josué de acuerdo con el relato bíblico.
En esta sociedad en la que se vive actualmente se han levantado murallas fuertes y a los parecer indestructibles, formadas por la maldad, que impiden conquistar el reino del Sr. y el triunfo del bien y la justicia.
El llamado que se hace a todos los ciudadanos es de ayudar a salvar al mundo, y derrumbar las murallas de odio, guerra y el materialismo.
Es necesario echar  abajo esas murallas, y de nuevo es válida aquella orden de Dios, en el sentido de que los habitantes se unan en oración en el marco del llamado “Sitio de Jericó”, que consiste en una Semana de Adoración Eucarística.
Durante la época contemporánea se hizo un Sitio de Jericó de doce días en Czsestochowa, con motivo del viaje del entonces papa Carol Wojtyla a Brasil. Esta práctica también es implementada por las actuales autoridades eclesiásticas, sobre todo ahora que el clamor de la humanidad es la paz.