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LLUVIA Y DESCUIDO DE AUTORIDAD HICIERON LOS BACHES MAS GRANDES

Gobierno municipal no pone atención, los vehículos se deterioran prematuramente

La reciente tormenta y lluvias que azotaron la región y en particular la ciudad han dejado como herencia innumerables baches pero más agrandados, con hundimientos más graves lo que además de causar accidentes como se observa en la gráfica está deteriorando toda clase de unidades motrices, desde bicicletas hasta carros y unidades de carga y del servicio de pasajeros, cuyos conductores todos se quejan del descuido de las autoridades.

No hay quien ponga orden, por donde quiera que circulen los vehículos, las pesadas unidades del transporte urbano del servicio de pasajeros o del transporte de carga se ven baches por todos lados, es el común denominador.

A tal grado de que los automotores tienen que sacarle la vuelta a los baches, o de plano si llegan a caer tienen que pasar con cuidado, ya que está latente el riesgo de que si se cruza rápido se de una ponchadura, lo que es lamentable porque no solo habría que reparar la llanta o el neumático sino que  se tiene que pagar la compostura, lo que daña la economía popular,

Así se encuentra Reynosa, como nunca antes. Al hacer un recorrido por las principales vialidades como el bulevar Morelos o la avenida Hidalgo que son las de mayor circulación, o al recorrer las vialidades secundarias y las otras por donde nadie circula se vio lo mismo, no hay trabajos de bacheo, Ahora la excusa es que mientras no salga el sol no se puede bachear, pero las autoridades han tenido más de un año para hacerlo, y no lo han hecho, quien sabe que les pasa.

El clamor es generalizado de que tapen los baches, pero nadie hace caso, la ciudad sigue  en el olvido, dicen los conductores, los automovilistas, los choferes de los diversos medios del transporte colectivo y de carga.

Lo peor es que con las lluvias ahora no solo hay baches sino que su profundidad y dimensión se han incrementado en perjuicio de decenas de miles de automovilistas que cruzan a diario por las arterias principales y por las calles secundarias las cuales casi nadie cruza, ya que igual todas están sin bacheo.

Es raro encontrarse un pozo o bache que haya sido tapado por casualidad por la autoridad en turno, eso lo saben los conductores, cuyos vehículos se están deteriorando con anticipación, prematuramente, lo que provoca descomposturas en las unidades y que la población tenga que erogar para pagar las ponchaduras de llantas y para cubrir los gastos por concepto de reparaciones mayores por el desgaste por el mal estado en el que se encuentran las calles, las vialidades, las arterias y no se diga en las colonias, hundidas en el zoquete, en el fango, en el lodo, nada más porque las calles no se pavimentan ni se da respuesta al clamor y necesidades ciudadanas de quienes exigen una mejor ciudad, sin que este sueño se haga realidad.

La imagen corresponde a una vialidad secundaria que se comunica con el bulevar Morelos de esta localidad, siendo testigos de la falta de bacheo los peatones como el que se observa en la gráfica, y los automovilistas que cruzan por el lugar.