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La pandemia género autoempleo y desestabilidad laboral

Hay 22 millones de trabajadores sin un vínculo laboral reconocido.

La pandemia llegó a México hace un año, la cual dejó estragos económicos en los diferentes sectores, realizando un paro a nivel mundial en todas las industrias. Se buscó evitar la movilidad en todo lo posible, dejando una pérdida económica la cual después de un año comienza a detectarse un ligero aumento.

De acuerdo al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), se reporta que de marzo del 2020 a marzo del 2021 hubo una disminución de 457 mil 234 puestos de trabajo. Este periodo coincide con el primer año de pandemia por COVID-19 en México. No obstante, en los primeros cuatro meses de 2021 se han recuperado 296 mil 751 empleos, según los reportes del IMSS.

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Esta situación se traduce en una recuperación favorable para la economía. Es importante resaltar que las autoridades ya han vacunado un gran número de personas, lo cual deriva en aperturar cada vez más la economía. De acuerdo a las expectativas del crecimiento mundial, el Banco Mundial también aumentó su pronóstico de crecimiento para el PIB de México a 5 por ciento en 2021, 1.3 puntos porcentuales arriba de lo previsto en enero.

No obstante, esta situación no es tan agradable para los diferentes sectores, ya que el aislamiento obligado derivó en que la población comenzó a generar sus propios empleos y por ende, muchos ya no quieren regresar a sus oficios, puestos de trabajo o sectores en los que se desempeñaban.

El auto empleo surge por la necesidad.

De acuerdo a Pablo Rena Quiroga, economista local, indica que esta situación se comenzó a gestar debido a que muchas personas viven al día y se quedaron sin empleo en la mayoría de los casos, aprovechando las plataformas digitales, comenzaron a realizar sus proyectos.

Muchos, aunque diferentes servicios o productos, se enfocan en la venta por internet, un sector optó por realizar comidas y venderlas a domicilio, hecho que muchos restaurantes tuvieron que hacer, sin embargo al tener que pagar impuestos así como insumos y sueldos la comida suele ser más cara que en comparación a los que emprendieron en este ramo.

Muchos más iniciaron en ventas de productos comprando en otras plataformas para ofrecerlas a un costo ligero, a este sector se les denominaron nenis, ya que la transacción se realiza en plataformas digitales. El nombre se le atribuye al comentario “¿En donde entregas neni?”, para después citarse en algún punto de la ciudad dependiendo en qué estado se realice dicha acción, suele ser en centros comerciales, plazas u otras ubicaciones.

Por otra parte se sabe que en solo tres meses, de abril a junio del presente año, se incrementó 90% el uso de aplicaciones de compras en México, lo que revela un panorama favorable para las plataformas de comercio electrónico en general, de acuerdo con el Reporte sobre el Impacto del Covid-19 en Venta Online, elaborado por la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO), estas cifras reflejan el impacto que la pandemia está teniendo en las empresas, marcas y hábitos de consumo de los mexicanos a través del canal digital.

En México aun hay mas de 50 millones de mexicanos en situación de pobreza laboral

Recientemente el Coneval, reveló que hay 50.1 millones de mexicanos que se encuentran en situación de pobreza laboral en el primer trimestre del año, lo que significa que el 39.4% de la población total en el país se encontró en una situación donde los ingresos laborales de su hogar no son suficientes para adquirir una canasta alimentaria básica para todos los miembros.

En el primer trimestre de 2021, el porcentaje de la población mexicana en situación de pobreza laboral disminuyó respecto al cierre de 2020, al pasar de 40.7% a 39.4%, es decir, a pesar de que se registró una disminución en el nivel de pobreza laboral a nivel nacional al comparar con lo observado en el tercer y cuarto trimestre de 2020, todavía no se recuperan los niveles que había antes de la llegada de la pandemia.

Esta situación se ha derivado en que en las cantidades también se ha detectado un ajuste en el tema económico, en una gráfica compartida por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) Tamaulipas aparece en la lista de las entidades afectadas por esta situación.

Al cierre del primer trimestre de 2021, y a un año de que se empezaran a observar los efectos de la pandemia en la economía, sólo seis entidades federativas tienen un nivel de pobreza menor que el observado en el 1T2020: Campeche, Chiapas, Nayarit, Oaxaca, Tamaulipas y Zacatecas. Resalta el caso de Nayarit, en donde 30.8% de la población se encontraba en situación de pobreza laboral en el 1T2020 y, al cierre del 1T2021, el 27.1% de su población se encontró en esta situación.

La gente ya no quiere regresar a sus trabajos, crece la informalidad.

La cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (CANIRAC), dio a conocer que han detectado un crecimiento de hasta un 60 por ciento con la apertura y llegada de más establecimientos, sin embargo ahora no hay quien ocupe las vacantes que se ofertarán por el autoempleo que generó la pandemia del COVID-19.

Al respecto, Juan Enrique Real Blanco, consejero de la CANIRAC en la localidad, dio a conocer sobre este crecimiento que han detectado es favorable, ya que por más de un año permanecieron cerrados ya que las autoridades no permitían las aglomeraciones en estos giros, hecho que ocasionó el autoempleo por la desocupación que se dio en algunos sectores.

“Está creciendo Matamoros. La industria restaurantera está creciendo. Estamos creciendo un 60%, se han abierto muchos negocios y eso beneficia a Matamoros. Ahorita nos va hacer falta mano de obra, no hay gente que quiera trabajar en la industria restaurantera. Necesitamos conseguir o capacitar gente porque no hay gente que quiera trabajar en esta industria”, afirmó.

La informalidad laboral contempla a aquellos trabajadores cuyo empleo no les proporciona un vínculo laboral reconocido ni les garantiza el cumplimiento de sus derechos laborales, los cuales incluyen el acceso a una pensión para la vejez, el cumplimiento de una jornada laboral, liquidación y vacaciones por ley, entre otras prestaciones.

Esto ocasiona que exista un mayor número de personas que no contará con las prestaciones de ley, ya que muchos han decidido trabajar por su cuenta. Esto se representará a corto plazo ya que hay alrededor de 22 millones de trabajadores sin un vínculo laboral reconocido. Aunque la tasa de informalidad (TIL2) alcanzó un nivel de 49.2% en el tercer trimestre de 2020, la tasa ha sido mayor a 50% en el resto de los períodos incluidos en la serie del INEGI (que inicia en 2005).

Queda claro que la pandemia ha obligado a muchos mexicanos buscar ingresos alternos, llevándonos al incremento en el auto empleo y la informalidad comercial, y muchos aseguran que los cambios en la economía y comercio mexicano perduren por años después de que superemos la era del COVID.