Monseñor hace un llamado a la población a abrir su corazón y ayudar al prójimo así como Jesús y el Papa Francisco lo han mandado
Durante la misa realizada por el inicio de la celebración de la cuaresma, el obispo de la diócesis de Matamoros, Eugenio Andrés Lira Rugarcía, llamó a la sociedad a celebrar el triunfo del amor de Dios y a imitarlo abriéndole el corazón al prójimo y a hacer ayuno de actuar en contra de los hermanos.
El padre indicó que en estos tiempos de extrema violencia, cuando las personas necesitan más de Dios, es necesario hacer un tiempo en la vida cotidiana para tratar de darle alivio a quien lo necesite e ir a visitar a las viudas, huérfanos y extenderle la mano al caído.
«Durante la cuaresma vamos a celebrar el triunfo del amor; tanto nos ha amado Dios que se entregó por nosotros y dio la vida para rescatarnos del pecado y de la muerte, porque Jesús resucitando nos demuestra que es más fuerte que la muerte, así nos preparamos para demostrarnos que también podemos seguir el camino del amor», dijo.
El clérigo aceptó que existen personas en la nación que no tienen acceso a una comida nutritiva, por lo cual recomendó cambiar el mandato divino del ayuno por una penitencia como: acomedirse en las labores del hogar, visitar a los enfermos o hacer labores altruistas.
Monseñor mencionó que desde hace años el ayuno consiste en hacer una comida fuerte y dos ligeras al día, y que están invitados a realizarlo las personas de 18 a 59 años, se observará únicamente los miércoles de ceniza y los viernes santos.
Añadió que las personas que no puedan abstenerse de ingerir carne, práctica que se debe realizar durante todos los viernes del año y no únicamente los de cuaresma, pueden comerla, siempre y cuando hagan actos de caridad y eviten atacar física y verbalmente a sus prójimos, pues el objetivo de esto es salir del egoísmo para comenzar a pensar en los demás y hacer algo por quienes nos rodean.