La Policía estatal impidió la entrada de los ciudadanos que asisten a las sesiones
A través de sus redes sociales, el diputado local por Matamoros José Alberto Granados Fávila denunció una presunta toma del congreso por parte de la Polícia Estatal Acreditable (PEA) para evitar que los ciudadanos que acuden a las sesiones del pleno ingresen al lugar.
Y es que desde la tarde de ayer cuando los ánimos se elevaron y los morenistas tomaron el lugar para evitar más «pisoteos» al pueblo, se registró una serie de acciones con las que se pretende «blindar» el edificio para mantener de alguna forma el control de las sesiones.
Con el lema de «El Pueblo Unido Jamás Será Vencido», el diputado morenista apoyado por sus colegas de curul y de partido explicaron que mas de 270 mil tamaulipecos están exigiendo un cambio verdadero y eso implica cambiar también las acciones que por años se han realizado y todas en favor del gobernante en turno pero muy alejadas del pueblo.
“En un acto desesperado del Gobernador y los diputados del PAN, en este momento están llegando policías estatales al Congreso para reprimir al pueblo y evitar que asista a la sesión de hoy. Quieren violar la ley una vez más y modificarla para proteger al gobernador y a sus funcionarios y de esa manera evitar que rindan cuentas al pueblo cuando se vayan con el dinero robado a las y los Tamaulipecos”, dijo.
A este reclamo se unió también el diputado Marco Gallegos, quien al igual que granados alzó la voz para impedir que las puertas del recinto estatal y que es considerado como «la casa de los tamaulipecos» se cierren a quienes tienes derecho de presenciar las «juntas» para decidir el futuro del estado.