Los principales puntos de discusión fueron inseguridad y deportaciones
En una reunión privada que se efectuó en las instalaciones de la iglesia de Nuestra Señora de Lourdes, el gobernador de Tamaulipas Francisco García Cabeza de Vaca, planteó ante los líderes religiosos católicos, la estrategia de seguridad para Tamaulipas asegurando que este no es un gobierno «ocurrente».
Lo anterior fue dado a conocer por el obispo de la diócesis de Matamoros, Monseñor Eugenio Andrés Lira Rugarcía, quien aseguró que la principal preocupación que invade a la Iglesia católica es la inseguridad en las carreteras del estado, ya que muchos siervos de Dios han sufrido ataques por parte de la delincuencia organizada.
«Le solicitamos al gobernador que ponga atención en el tema de la inseguridad, ya que en tiempos anteriores algunos de nuestros sacerdotes sufrieron ataques en la carretera, a algunos les quitaron los autos, el dinero, el teléfono, pero fue hace mucho, sin embargo no queremos que pase de nuevo», dijo.
El líder religioso explicó que en la reunión estuvo presente la sociedad sacerdotal de esta ciudad, quienes ademas de la convivencia, le expusieron al gobernador sus inquietudes y preocupaciones en el estado.