El 13avo Tribunal de Apelaciones confirmó la condena establecida en contra del ex jugador de fútbol de la preparatoria López, Javier de la Rosa Jr..
De acuerdo a la evidencia revelada en el caso, De la Rosa mató a su ex novia Tiffany Galván en el 2010.
Acorde a el documento del archivo oficial en agosto del 2012, de la Rosa, entonces de 18 años de edad, se declaró culpable en una corte de distrito del estado de asesinar a Galván, estudiante de Los Fresnos.
Los expedientes oficiales en el caso establecen que la declaración de culpabilidad se realizó un año después de que ella fue apuñalada 48 veces y De la Rosa fue condenado a 90 años de prisión.
El cuerpo de Galván fue descubierto en una zona boscosa cerca de Benavides Park el 25 de agosto del 2010 y poco después, el Departamento del Sheriff del Condado de Cameron detuvo a de la Rosa, en ese momento un estudiante de 16 años de edad en la preparatoria López.
Los fiscales estatales dijeron que de la Rosa fue visto tanto en la escena y salir de la zona donde se encontró el cuerpo de Galván y una acusación presentada contra de la Rosa afirma que, además de haber apuñalado a Galván con un «cuchillo o un objeto desconocido,» trató de robarle y secuestrarla a ella también.
Mientras que los abogados defensores proyectaron a de la Rosa como un simple estudiante de secundaria de un hogar humilde, los fiscales estatales lo retrataron como un adulto joven egocéntrico que estaba más preocupado por sí mismo que por su víctima.
De acuerdo con un comunicado de prensa de la oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Cameron, la Corte de Apelaciones a cabo de una revisión independiente del juicio a De la Rosa, no encontró ningún error en el.
El tribunal superior también confirmó la condena de Noe Lozoya, también de Brownsville quien fue declarado culpable y condenado a 50 años en 2013 por robo de una vivienda con la intención de cometer asalto agravado con arma mortal y robo.
Lozoya fue una de las cuatro personas en 2012 que perpetraron a la fuerza en una casa en Brownsville, informaron las autoridades y fue declarado culpable de aterrorizar a la familia con un bate de béisbol y un cuchillo, ya que saquearon sus pertenencias.
Varios artículos fueron tomados, incluyendo el vehículo de la familia.
El Tribunal de Apelaciones consideró y rechazó los argumentos de Lozoya y la corte de apelaciones no encontró ningún error en el juicio contra el acusado.