Duró dos meses viajando en «La Bestia» para poder llegar a esta frontera e ir tras el sueño americano
El precio del dólar, las políticas migratorias de Donald Trump ni su próxima toma de protesta como nuevo Presidente de los Estados Unidos han sido un factor que intimide a «Gerson», un ciudadano Hondureño que sueña con llegar a Seattle, Washington.
Procedente de la ciudad de San Pedro Sula, en la República de Honduras, este comerciante trabajó durante meses en la venta de relojes, bolsos y carteras para solventar sus gastos durante el trayecto.
Hace poco más de dos meses salió de su barrio para llegar a Chiapas y en la ciudad de Arriaga abordar el tren más peligroso que atraviesa la República Mexicana: «La Bestia».
«Viaje en el tren por casi dos meses, la gente que vi en el camino se portó muy amable, yo tenía algo de miedo cuando salí de mi tierra, pero no es la primera vez que lo hago, así que me arme de valor y seguí mi camino: llegue intacto a esta ciudad», dijo.
El viajero llegó a Matamoros hace casi dos semanas, tiempo que ha dedicado a limpiar los parabrisas de los autos que circulan por diversas avenidas de esta ciudad para juntar dinero y poder comer a diario.
Aunque no tiene un lugar fijo para dormir y en ocasiones lo hace en la calle, el ánimo de «Gerson» no decae; él afirma no temer al nuevo Presidente de los Estados Unidos ni a sus políticas: «No le voy a decir que ya llegue», asegura.
Éste viajero visualiza a los ciudadanos americanos como unos «Dioses» pues afirma que ellos son muy inteligentes y lo saben todo, por eso son una potencia mundial.
Invitó a todos los latinos que habitan en ese país a que se traten como hermanos y que dejen las competencias entre ellos, pues el furor latino debe estar presente y unido, dijo.
Este hombre espera el momento preciso para cruzar al lado americano y trabajar en lo que se le presente en aquel lugar.
La historia de «Gerson» es una más entre las miles que se presentan en esta ciudad.
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