Una poderosa tormenta invernal se avecina en EE.UU., trayendo consigo nevadas intensas, hielo peligroso y fuertes lluvias que afectarán a más de 62 millones de personas en un extenso territorio. La tormenta, que se desplegará desde las Llanuras hasta la Costa Este, podría generar condiciones traicioneras desde el sábado hasta el lunes, con vientos de hasta 65 km/h que complicarán los viajes y provocarán cortes de energía.
El Centro de Predicción del Tiempo de la NOAA advirtió que en algunas regiones, esta será la nevada más fuerte en más de una década. La tormenta traerá una mezcla de nieve y hielo, y en algunas áreas del sur, tormentas eléctricas severas. En su avance, cubrirá gran parte del centro y este de EE.UU., causando caos en las carreteras y provocando posibles apagones en zonas donde el hielo será más denso.
Se esperan acumulaciones de nieve de hasta 30 cm en áreas como Missouri, Illinois y Ohio, mientras que Kansas City e Indianápolis podrían batir récords de nieve para enero. A su vez, el hielo peligroso podría generar condiciones de viaje «casi imposibles» en estados como Missouri, Kentucky y Maryland, con la posibilidad de cortes de energía significativos debido al peso del hielo sobre árboles y cables eléctricos.
Además, la tormenta traerá fuertes lluvias y tormentas eléctricas al sur del país, donde también se prevén inundaciones y la amenaza de tornados. Aunque la tormenta disminuirá su intensidad a medida que se desplaza hacia la costa este el lunes, el frío ártico que la seguirá podría generar temperaturas extremadamente bajas que mantendrán las condiciones peligrosas hasta mediados de enero.