La presidenta Claudia Sheinbaum afirmó que el envío de 10 mil elementos de la Guardia Nacional y el Ejército a la frontera norte no pone en riesgo la seguridad en otras regiones del país. Durante su conferencia matutina, aseguró que esta movilización forma parte del Operativo Frontera Norte y fue diseñada por la Secretaría de la Defensa sin afectar la vigilancia en los estados.
Sheinbaum explicó que las tropas desplegadas reforzarán la seguridad en las aduanas para frenar el tráfico de fentanilo y, además, brindarán protección en carreteras clave como la ribereña. Subrayó que este esfuerzo responde a acuerdos con el gobierno de Estados Unidos, pero también representa un beneficio para México.
El operativo, que comenzó el 4 de febrero, busca detener el flujo de drogas, migrantes indocumentados y armas provenientes de Estados Unidos. Las autoridades aseguraron que la estrategia mantiene un estricto respeto a los derechos humanos y que el resto del territorio nacional continuará protegido con los más de 120 mil elementos de la Guardia Nacional.
La presidenta reiteró que esta medida no significa descuidar otras zonas del país, sino una reorientación estratégica de las fuerzas federales para atender prioridades sin descuidar la seguridad en el resto de la República.