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Protegerse del sol previene envejecimiento prematuro y cáncer de piel

De marzo a septiembre es el periodo de mayor radiación ultravioleta

Ante incremento de calor en la temporada de Primavera-Verano con temperaturas de hasta más de 40°C, y los constantes viajes a destinos turísticos durante las vacaciones de Semana Santa y Pascua, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) recomienda no tener una exposición excesiva a la radiación solar ultravioleta porque de lo contrario puede afectarse la piel de manera importante.

La Jefa de Dermatología del Hospital Regional, “Lic. Adolfo López Mateos”, Lorena Guadalupe Estrada Aguilar, señaló que 80 por ciento de la radiación solar que recibe el cuerpo se adquiere antes de los 18 años, de ahí la importancia de sensibilizar a los derechohabientes sobre los riesgos para la salud que conlleva la sobreexposición al sol y educar acerca de los cuidados preventivos.

Destacó que los riesgos acumulados de la exposición al sol sin protección se dividen en dos grandes grupos: envejecimiento prematuro manifestado por presencia de arrugas y manchas en la piel a edades más tempranas y, el factor de riesgo asociado a diversas enfermedades como “lupus eritematoso”, psoriasis y cáncer de piel, entre otras.  

“hay grupos de población que tienen prohibido asolearse con o sin protección, uno de ellos son los bebés de cero a dos años, ya que su piel es inmadura y no ha desarrollado las defensas necesarias, por lo que corren riesgo al exponerse a los químicos de filtros y protectores solares y, lo más importante, aumentan el riesgo de desarrollar cáncer de piel a edades tempranas”.

Refirió que la temporada de marzo a septiembre es el periodo de mayor radiación ultravioleta, por lo que el ISSSTE recomienda:

Atender las alertas por riesgo de radiación ultravioleta emitidas por los Sistemas de Monitoreo Atmosférico estatales o locales y seguir sus recomendaciones; no exponerse al sol entre las 11 y las 16 horas, periodo de mayor intensidad de las radiaciones y por lo tanto de mayor riesgo; buscar áreas de sombra para reposar o descansar y mantenerse bien hidratados; utilizar protección física como ropa holgada, de manga larga, sombrero de ala ancha, sombrilla e incluso ropa y guantes especiales con tecnología de protección solar.

Asimismo, utilizar protección química mediante la aplicación de filtros, pantallas y bloqueadores con factor de protección solar de 50 o 50+, y el uso correcto del filtro solar es aplicarlo cada tres o cuatro horas, capa sobre capa, mientras se esté expuesto al sol en un ambiente seco; en playa o albercas utilizar filtros solares resistentes al agua aplicar cada dos horas; retocar el filtro cada vez que salgan del agua y se vuelvan a meter.