Los estruendos podrían afectar las construcciones de la ciudad
Las ondas sonoras que cimbraron a esta ciudad hace unas semanas a consecuencia del despegue de una nave en la base de Space X ubicada en la zona cercana a la boca del rio Bravo en la ciudad de Brownsville, Tx., podrían afectar la infraestructura de los edificios locales, por ese motivo es que los regidores de las comisiones de Control Ambiental y Energía, apoyados por integrantes de otras comisiones, solicitarán al empresario Elon Musk la construcción de vallas protectoras que reduzcan el sonido al momento de los despegues.
Alma Rosa Alarcón Serna, regidora presidente de la comisión de Energía en el cabildo local, aseguró que la petición deberá pasarse por cabildo para ser aprobada por el resto de los regidores, y añadió que además, la empresa Sapce X debe realzar un impacto ambiental que determine la reacción que provocan los despegues entre la fauna que habita cerca de la base espacial.
Señaló que más que el estruendo, se trata del tema sónico y señaló que al incrementar la potencia del despegue, se elevan las ondas ultrasónicas que fueron las que “sacudieron” a Matamoros ese fin de semana donde, incluso, se sintieron en toda la región.
“Una situación similar se suscitó en el aeropuerto Internacional de la Ciudad de México con el despegue del Concord, y que lo hizo el aeropuerto a petición de los vecinos fue colocar unas barreras de sonido que son unas estructuras en forma de letra “K” y sirven para atrapar el sonido y regresarlo hacia el centro; esto hace que se minimicen las ondas”, dijo.
Añadió que las comisiones que se suman a este proyecto están solicitando un estudio de impacto, esto debido a que si Space X hará una cierta cantidad de despegues al año, y cada despegue será con la misma intensidad que el último que hicieron, entonces los edificios de la ciudad se verían comprometidos.