Ante la contingencia por Cóvid-19, las celebraciones de semana santa van a ser diferentes este año nuevamente, así lo declaró el obispo de la diócesis de Matamoros Eugenio Andrés Lira Rugarcía, quien explicó que la misa del domingo de ramos se celebrará en Matamoros y también en el Hospital General de Valle Hermoso.
Monseñor Lira explicó que la misa en la catedral de Matamoros iniciará a las 11:00 de la mañana con una pequeña procesión únicamente con el equipo litúrgico para despúes ir a la ciudad de valle hermoso para desarrollar la santa misa en el estacionamiento del nosocomio donde acomodarán las sillas para el personal médico con una distancia considerable respetando las medidas de seguridad emitida por el gobierno.
Además, el obispo señaló que que para garantizar la seguridad sanitaria de la gente y evitar un rebrote de Cóvid durante la semana mayor, evitarán las reuniones masivas y no habrá procesiones, pero seguirán transmitiendo las misas a través de los medios digitales.
Indicó que además de esto, van a ofrecer subsidios para que la gente pueda seguir celebrando la semana santa desde su hogar, sin embrago, para quienes deseen acudir al templo, solo recibirán a la cantidad de feligreses que acumulen el 50 por ciento de la capacidad de los recintos religiosos.
«Los fieles antes de ingresar, se va a comprobar que no tengan temperatura, que no tengan ningún síntoma gripal y después les vamos a pedir que se higienicen sus manos con gel antibacterial y que limpien sus zapatos con los tapetes sanitizantes que estarán en la entrada de las iglesias», dijo.