El líder sindical asegura que los empleados ya tenían la encomienda de desvirtuar la reunión que se iba a sostener en esa empresa
Luego de que la totalidad de los trabajadores sindicalizados de la empresa maquiladora MECALUX de esta ciudad se fueran a huelga reclamando el cambio de sindicato por recibir malos tratos en el que pertenecían, el Secretario General del SITPME, Jesús Mendoza Reyes, desmintió esas declaraciones y acusó a los trabajadores de hacer un boicot en su contra y de desvirtuar la reunión que él iba a sostener con los directivos de dicha empresa.
Mendoza Reyes negó las declaraciones de los obreros cuando se dicen agredidos por el líder sindical, además de ser castigados con suspensión por parte de la empresa por haberse negado a saludarle de mano.
El Secretario General del Sindicato Industrial de Trabajadores en Plantas Maquiladoras y Ensambladora de Matamoros, señaló que la visita que realizó a esa maquiladora fue para generar un ambiente de confianza y cordialidad con los directivos de ese lugar, ya que ellos están a la expectativa de lo que puede suceder con la economía mexicana ante las políticas de trabajo del Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
«Yo acudí a esa empresa así como he ido a todas mis empresas, a llamarlas a la unidad y que no se desesperen ante las declaraciones del Presidente Donald Trump; los empleados del lugar querían que en ese momento se nombrara un delegado sindical y al parecer uno de esos alborotadores quería ese puesto, le dije que por el momento, el motivo de mi visita era llamar a la unidad, lo que los molestó y desató el conflicto», dijo.
Jesús Mendoza asegura que los trabajadores alteraron el orden del lugar y mintieron tajantemente al acusarlo de maltratarlos.
El Secretario General del SITPME, mantuvo su postura de cero maltratos y aseguró que la huelga que hicieron sus agremiados fue un paro ilegal, pues el movimiento que ellos realizaron fue hecho sin fundamentos válidos para ese movimiento.
Explicó que los estatutos sindicales lo facultan para realizar el nombramiento de un delegado, y que esperará a que las cosas se tranquilicen para ir a realizarlo.