Pueden ser víctimas de accidentes viales al lidiar con autos en movimiento
Uno de los principales problemas al que se enfrentan los niños cuyos padres decidieron darles la responsabilidad de trabajar en los cruceros, es arriesgarse a contraer enfermedades de la piel, tales infecciones, alergias y hasta cáncer, derivadas de la exposición a los rayos del sol durante un tiempo determinado.
Lidia Margarita Hernández Céspedes, técnico en urgencias médicas de la Cruz Roja Mexicana delegación Matamoros, aseguró que esta práctica es muy común entre los padres de familia de escasos recursos, sin embargo, es su posición la que les impide saber si sus hijos son alérgicos a algún químico y les pintan la cara con los mismos productos que usan para ellos.
Aseguró comprender que la escasez de dinero en esta ciudad, es la que obliga a los padres de familia a incluir a todos sus hijos en la aportación de ingresos para el hogar, pero aseguró que esas acciones conllevan un riesgo que los adultos deben evitar.
Dijo que además de exponerse al sol y a los productos tóxicos, los niños pueden ser víctimas de accidentes viales al lidiar con autos en movimiento, además de arriesgarse a sufrir quemaduras si trabajan cerca de los tragafuego y a heridas si son acompañantes de los malabaristas con armas blancas.