Ya son 13 días
La tormenta que azotó a Matamoros los últimos días de abril y las lluvias subsecuentes dejaron son luz al una cuadra del ejido Guadalupe de esta ciudad, quienes han tenido que pedir agua «prestada» a sus vecinos que si tienen luz, y tirar todos los comestibles que se les descompusieron por falta de congelación.
Los afectados, más de 150 personas mencionan que hicieron el llamado oportuno a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para que acudieran a reparar el desperfecto que les regresaría la luz, pero solo recibieron como ayuda el cambio de un transformador que está oxidado y en malas condiciones.
Se trata de la calle Privada Hernándes, donde más de 40 familias sufren los estragos de habitar en un sitio con la suficiente vegetación para crear a una gran cantidad de zancudos que no dejan en paz principalmente a los niños.
«No nos pudieron poner un transformador más viejo?, ese no sirve para nada, solo fue un curita para tapar la herida proque en realidad no nos arreglaron nada; hay que decir que el transformador sí nos regresó la luz, pero solo por 12 horas porque se fue y no volvió mas», dijo.
En el ejido hay personas de la tercera edad sufren de problemas de salud por la edad, un ejemplo de esto es el caso de la señora Jacinta, que al padecer una enfermedad pulmonar, debe tener constantemente su tratamiento de nebulización, el cual, lleva ya 13 días de no utilizar agravando su condición.
También, dentro de las casas afectadas vive un señor de la tercera edad que utiliza una silla de ruedas, y que también requiere de su servicio de luz para realizar sus actividades cotidianas.
Señalan que en días pasados, el personal de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) ya recorrió cada una de las casas que se ubican dentro del ejido Guadalupe para tomar la lectura de los medidores de luz, a lo que los afectados explican que a ellos también les van a cobrar el servicio aún y cuando no los estén atendiendo en este momento.