Los migrantes que pernoctan en las márgenes del río Bravo podrán ser reubicados durante los primeros días del mes de febrero, esto para evitar que continúe el hacinamiento en la planicie del bordo.
Fuentes cercanas al campamento de los migrantes centroamericanos revelaron que parte de la situación que orilló al Gobierno Federal a solicitar su reubicación, se debe a las grandes cantidades de dinero que la federación paga a los proveedores de la estructura metálica y las lonas que se colocaron para el resguardo de los centroamericanos.
Los trabajadores del campamento añadieron también que los migrantes serán ubicados en el predio que alberga la ex planta maquiladora conocida como “Cepillos de Matamoros”, que se ubica en la calle primera y azucenas en la colonia Jardín de esta ciudad, lugar donde pernoctarán por dos meses aproximadamente.
Manifestaron que el proyecto se divide en dos fases, una de las cuales consiste en la permanencia en las instalaciones de la empresa abandonada, para después llevarlos a un lugar que se habilitará como centro integrador para los migrantes.
Manifestaron que los migrantes en situación de solicitantes de asilo político no deben estar en ese sitio, mucho menos porque el grado hacinamiento que tienen les puede provocar un foco de infección para los niños que viven en las carpas.