El gobierno canadiense ha decidido tomar medidas en represalia contra Estados Unidos, luego de que el presidente Donald Trump impusiera un arancel del 25 por ciento sobre las importaciones de acero y aluminio. Esta acción responde a la decisión de EE.UU. de aplicar nuevos gravámenes, lo que ha generado una tensión creciente entre ambos países.
A partir de este jueves, Canadá impondrá aranceles del 25 por ciento sobre productos estadounidenses que totalizan 29 mil 800 millones de dólares canadienses (20 mil 700 millones de dólares estadounidenses). La medida afecta a una amplia gama de artículos, desde acero hasta herramientas y productos electrónicos, según los ministros canadienses involucrados en la política comercial, como Dominic LeBlanc, Mélanie Joly y François-Philippe Champagne.
El Gobierno de Trump comenzó a aplicar los nuevos aranceles a partir de la medianoche del martes, extendiéndolos a productos provenientes de varios países, incluidos los de Canadá. Estos gravámenes se suman a otros previamente establecidos contra productos canadienses que no forman parte del acuerdo comercial T-MEC, lo que ha aumentado las tensiones entre las dos naciones.
El ministro de Finanzas canadiense, LeBlanc, explicó que las represalias afectarán aproximadamente 12 mil 600 millones de dólares canadienses en importaciones de acero de EE.UU. Además, otros productos como equipos deportivos y ordenadores también estarán sujetos a nuevos aranceles. Canadá ya había impuesto medidas similares sobre 30 mil millones de dólares canadienses en productos estadounidenses, desde bebidas alcohólicas hasta electrodomésticos. LeBlanc advirtió que el gobierno canadiense está dispuesto a imponer más aranceles si la situación no mejora.