Por primera vez en la historia, la ciudad de Matamoros fue sede de un juego de fútbol entre equipos de primera división pues la tarde del viernes 12 de octubre, el estadio Hogar recibió en su cancha a las Águilas del América, quienes se midieron y cayeron 2-1 ante los Gallos Blancos del Querétaro.
El juego fue anunciado y esperado por los aficionados locales durante muchas semanas, quienes se vieron en la necesidad de ahorrar durante ese tiempo para poder pagar los boletos de ingreso al estadio, los cuales, días antes del encuentro, bajaron su precio de 1, 400 pesos a 1,050 y 800 según el área deseada.
Días antes del encuentro, los empresarios y promotores del evento lanzaron una campaña para anunciar la presencia de las estrellas tanto del América como del Querétaro, esto debido a que ambos equipos fueron eliminados de la Copa Mx; el primero en octavos y el segundo en cuartos de final.
Aun y cuando los jugadores estaban heridos anímicamente, los aficionados matamorenses esperaban un espectáculo digno del costo que pagaron para entrar, sin embargo, la sorpresa llegó cuando Oribe Peralta no salió a la cancha, siendo que fue uno de los jugadores mas anunciados y esperados por todos.
A la cancha solo salieron las bancas de ambos equipos quienes satisficieron las exigencias de los presentes, que en su mayoría eran azulcrema y solo se quedaron con la emoción de ver a los jugadores en tierras matamoreneses.