Ingesta del azúcar contenida en la leche ocasiona diarrea incontrolable
En el último año 842 niños de Tamaulipas menores a un año fueron atendidos por el síndrome llamado Intolerancia a la lactosa, que es una de las causas por las que las madres llevan a consulta a sus recién nacidos, informó la directora de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) N° 33 del Instituto Mexicano del Seguro Social, Dra. Araceli Magdalena García Hernández.
Por este medio hizo un llamado a las madres de familia acerca de la importancia de acudir cuanto antes con su médico, al detectar síntomas de diarrea en el bebé, para que reciba la atención adecuada y se evite poner en riesgo la salud del menor.
“El principal síntoma de este padecimiento, que es una diarrea incontrolable generada por la ingesta del azúcar contenida en la leche, conocida como lactosa, alertó a las madres de familia”, indicó directora de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) N° 33 del Instituto Mexicano del Seguro Social.
Explicó que para digerir el azúcar de la leche, a partir del tercer mes de gestación, las células del tubo digestivo del ser humano deben de sintetizar una enzima llamada lactasa, que deberá desarrollarse progresivamente hasta lograr su máxima actividad en el primer año de vida.
Al no poder digerir el azúcar de la leche, ésta pasa directamente al colon, donde las bacterias la fermentan y producen cambios osmóticos, gases y ácidos grasos de cadena corta, que provocan un alto contenido de líquidos en las evacuaciones de los niños, al igual que ácidos, gases y lactosa, agregó.
“Un diagnóstico oportuno, por medio de la historia clínica y la exploración física del niño en ocasiones es suficiente, sin embargo ante la duda, se sugiere realizar otras pruebas y estudios complementarios que lleven a comprobar la presencia de este padecimiento, para de esta forma indicar un tratamiento adecuado, que pudiera ser la reducción de la lactosa adicionando agua a la leche, o bien indicando una fórmula apropiada existente en el mercado”, señaló la Dra. García Hernández.
Destacó que en los primeros meses de vida, la leche es el principal alimento de los bebes, y que la opción de restringir la lactosa no debe evitar el consumo de los nutrientes necesarios para preservar la salud del niño y su desarrollo.
Comentó que independientemente del tratamiento a seguir, es muy importante vigilar el estado de hidratación y de ser posible, continuar alimentando con el seno materno, ya que además de todas las propiedades benéficas que la leche materna aporta al bebé, ésta reduce la sintomatología, a pesar de su concentración de lactosa.
Finalmente, la titular de clínica del IMSS, enfatizó a las madres la importancia de acudir cuanto antes con su médico, al detectar síntomas de diarrea en el bebé, para que reciba la atención adecuada y se evite poner en riesgo la salud del menor.