Al momento apoyan a 45 niños de diversos municipios del estado
La Organización Civil Voluntad Contra el Cáncer de Río Bravo-Reynosa se encuentra recolectando libros del pasado ciclo escolar; esto dentro de la campaña de reciclaje para recolectar más fondos que ayuden a solventar los gastos de esa fundación.
Julia Aseneth García Gómez, presidente de la Asociación Civil “Voluntad Contra el Cáncer”, señaló que el sector educativo de esta región está comprometido con esta A.C., ya que les colaboran con la recopilación de los libros a reciclar; además, la industria maquiladora se sumó a la causa colocando contenedores grandes fuera de sus empresas para que los interesados depositen ahí los libros del ciclo pasado.
“Pasamos nosotros, con montacargas cargamos esos libros que nos donan y con eso podemos ayudar a conseguir más fondos para la Asociación Civil. En este momento yo no tengo un área de recolección aquí en Matamoros; lamentablemente no pudimos venir por los libros que nos dio una universidad; pero los padres de pacientes de aquí nos llevan para allá los artículos”, dijo.
Ese organismo, que se encuentra ubicado en la ciudad de Rio Bravo, Tam., atiende actualmente a 45 niños de edades entre los cero a los 17.5 años, mismos que cuentan con diversos diagnósticos, como la Leucemia Linfoblástica Aguda, tumores sólidos entre otros que tienen que ver con el cáncer.
Esta fundación atiende a niños de ciudades como Matamoros, Valle Hermoso, Nuevo Progreso, Río Bravo, Reynosa, Ciudad Victoria y Tampico, sin embargo, los niños de estos dos últimos municipios ya son atendidos en el Hospital Regional para Niños con Cáncer, que antes era el IMSS 270.
Señaló que la fundación apoya a los padres de familia de los pacientes con el recurso que les haga falta para el tratamiento que se necesite al momento, es decir, que si un padre de familia pasa por un proceso de diagnóstico de cáncer con su hijo, deben comunicarse vía WhastApp con la fundación y ellos valorarán la necesidad y les otorgarán desde el pago de los estudios primarios, hasta un tratamiento de quimioterapia.
“Lo que nosotros pedimos es la hoja de diagnóstico o, en caso de no tenerla pero que un médico tratante presuma que podría ser una leucemia y ellos no cuenten con el estudio, nosotros se los podemos pagar; necesitamos la hoja de diagnóstico, el médico tratante, la edad del niño, la ubicación y cuál es su necesidad primaria porque de caso en caso varían”, dijo.