Con el fin de interceder por la vida y viaje de todos los migrantes del mundo, en especial aquellos que llegan a la frontera de México con Estados Unidos, la diócesis de Matamoros-Reynosa llevó a cabo una misa en la catedral de Nuestra Señora del Refugio en Matamoros donde estuvieron presentes ciudadanos sudamericanos que están de paso por este país y que esperan su turno para alcanzar el sueño americano.
Monseñor Eugenio Andrés Lira Rugarcía, obispo de la diócesis de Matamoros, explicó que la misa de intercesión a Dios por los migrantes, asistieron personas hondureñas, cubanas y panameñas, quienes acompañados por el padre Francisco Gallardo López, líder de la pastoral social de la diócesis de Matamoros y su equipo de trabajo, revivieron las hazañas que sortearon durante su paso por diversas regiones antes llegar a esta zona fronteriza.
Señaló que la petición y ruego a Dios es esencialmente para que su poder divino cambie la mente del mundo en torno a los migrantes, pues hace falta más tolerancia y aceptación de la población hacia los viajeros que se ven obligados a dejar su lugar de residencia, su casa, familia y amigos, por buscar una mejor calidad de vida o bien proteger su vida y la de los suyos que se ve amenazada por la violencia en sus paises.
“El Papa Francisco ha defendido tanto la causa de los migrantes y ha pedido que tomemos conciencia de la situación que viven. Estamos a punto de iniciar un jubileo en 29 de diciembre vamos a abrir el Gran Jubileo del 2025 y el Papa entre los temas que nos pide en la convocatoria es atender a los migrantes, ofrecerles esperanza y es lo que queremos hacer”, dijo.
Respecto a Matamoros, aseguró que las personas aún se sienten cansadas de que lleguen por aquí muchos migrantes, pero agregó que la mayoría de los matamorenses es gente bien generosa y es gracias a ese sentimiento que la ayuda a los viajeros no ha cesado desde que llegaron a esta región las primeras olas de migrantes centroamericanos.