Yadira Hernández | El Sol de Tampico
Tamaulipas fue la última de las entidades en México en autorizar que parejas del mismo sexo pudieran contraer matrimonio, sin embargo en lo que va del 2023 aumentó la cifra de divorcios igualitarios.
Y es que el Congreso en el Estado aprobó el 26 de octubre de 2022 modificar el Código Civil para quitar las palabras “el hombre y la mujer”, texto quedó: “Quienes contraigan matrimonio deben ser mayores de edad”.
Ahora el trámite para el matrimonio igualitario es lo mismo que el matrimonio entre personas heterosexuales, por lo cual, los contrayentes deben cumplir con los mismos requisitos y las pláticas pre-matrimoniales, pues antes tenían que acudir a otra entidad para anteponer un amparo y lograr la autorización en el Registro Civil.
En base a los datos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) de matrimonios de personas del mismo sexo en Tamaulipas, por cada 100 parejas que se casan 17 terminan en divorcio, la edad promedio de los hombres para casarse es de 37 y para las mujeres es de 35 años, siendo las parejas femeninas las que más se divorcian.
La coordinación del Registro Civil en Tamaulipas reporta que desde octubre del 2022 a marzo del 2023 se tenían poco más de 130 matrimonios igualitarios, con 17 divorcios de parejas femeninas y seis separaciones matrimoniales de uniones entre hombres, lo que refleja un aumento de los divorcios entre los casamientos de personas que pertenecen a la comunidad LGBTQ+.
El primer divorcio de matrimonios igualitarios en Tamaulipas se registró en el 2015 a un mes de que la pareja se casó, se trató de una mujer transgénero y un varón, que habían sido la segunda pareja que ejercieron su derecho a unirse legalmente tras recibir el amparo y en el 2019 se registró la segunda separación, en esta ocasión fueron dos mujeres que se habían casado en Tampico.
Con estos cambios en la legislación por primera vez, las personas de la comunidad LGBTQ+ pasaron a ser iguales a las heterosexuales en cuanto a la forma de contraer, mantener o disolver su vínculo matrimonial, señala el abogado especialista en divorcios Carlos Martínez Meza, quien menciona que la norma dio lugar a que disfrutaran de los derechos y los deberes de este estado civil.
Comenta que ahora los miembros de estos colectivos tendrán también un matrimonio con derechos hereditarios del viudo/a, el derecho a adoptar, el deber de mantener una convivencia conyugal, la obligación de respeto y socorro, entre otros que se adquieren en el contrato que se hace ante el Registro Civil.
Añade que «en definitiva y a efectos legales, la única diferencia entre un matrimonio heterosexual y uno formado por miembros del mismo sexo, es que el segundo sólo puede celebrarse civilmente ya que la institución eclesiástica no permite contraer matrimonio a personas homosexuales».
Por lo tanto, expone, el procedimiento para que un matrimonio gay se divorcie es exactamente el mismo que el de uno heterosexual, debiendo cumplir y aportar los mismos documentos y pudiendo desarrollarse por la vía contenciosa o de mutuo acuerdo.
«Los requisitos para iniciar este proceso serán exactamente iguales que en el caso de una pareja heterosexual: haber transcurrido 3 meses desde la celebración del enlace y llegar a un acuerdo regulador para algunos aspectos como la pensión compensatoria, el uso del domicilio conyugal, la custodia de los hijos», añade.
Esto se debe a la incorporación del concepto de diversidad a la causa de las personas lesbianas, gays, bisexuales, transexuales, transgénero, travesti e intersexuales, pues reconoce que existen varias maneras de expresar la sexualidad, el género y la cultura, e incluso que no hay una única biología humana.
Ana Karen López Quintana, presidenta de Tamaulipas Diversidad Vhida Trans, señaló que durante muchos años se ha luchado por la igualdad entre parejas de la comunidad LGBTQ+.
Es precisamente que durante la marcha que realizada el pasado 17 de junio, tuvo como objetivo sensibilizar a los diputados del Congreso del Estado de Tamaulipas, ya que en su opinión la entidad está rezagada en materia de derechos de diversidad sexual.
Recordó que a pesar de que la Ley de Identidad de Género ya se encuentra en el Congreso, esta no ha sido puesta a votación: “este 31 de junio, si no se lleva al Congreso a votación esta iniciativa, ya no se va a llevar a cabo”.
En Tamaulipas continúan sin ser respetados sus derechos, ya que las personas que son portadoras del VIH no pueden contraer nupcias, como tampoco se aprobó la adopción de menores despejando uno de los últimos obstáculos para lograr la plena igualdad matrimonial.