Don Juan tiene 67 años y no piensa dejar de trabajar
Con la frase bíblica de “Joven fui y he envejecido” el señor Juan de 67 años, sale de su casa cada día para llegar hasta la esquina de la calle Ingenieros de Chapingo en la colonia Treviño Zapata para poner a la venta bolsas con nopales; producto que comercializa desde hace ya varias décadas atrás.
Don Juan, originario de San Luis Potosí, quedó viudo hace varios meses, pero después de resignarse a la partida de su esposa decidió salir adelante y continuar con su trabajo, mismo que le da para vivir aunque la crisis y la inflación también lo hayan alcanzado, pues vende una bolsa con 14 nopales limpios en 20 pesos; por desgracia, no siempre logra hacer sus ventas.
Sin familia cercana a él, pasa sus días solo en su domicilio únicamente refugiado en su fé de la que toma el pasaje salmista “Joven fui y he envejecido y no he visto justo desamparado ni su decendencia que mendigue pan”, el señor Juan emplea su tiempo conociendo a fondo el producto que vende, ya que asegura que cuando las personas trabajan como si fuera para sí mismos, las cosas siempre salen mejor.
“No se crea, hay veces en las que no saco nada, no vendo nada, otras veces vendo 10 paquetitos, a la gente le gusta el nopal picadito y limpiecito y yo así de los doy, para que regresen y sigan comprando aquí”, dijo.
Aseguró que no tiene hijos, solo una sobrina de la que sabe, vivía en la colonia Buena Vista pero nunca ha podido dar con ella.
El señor Jose aseguró que el producto fresco es mejor para el consumo alimenticio y aseguró que los nopales que venden en los centros comerciales no siempre son de buena calidad y además, tienen costos más elevados.