Es un grupo de sacerdotes que están preparados para saber actuar ante el mortal virus del COVID-19 en Reynosa y Matamoros.
Pese a que el COVID-19, Coronavirus ha ocasionado que las iglesias, templos y organizaciones religiosas, así como otros actos donde hay aglomeraciones están suspendidos, la comunidad católica ha preparado a un grupo de sacerdotes para que acudan a los nosocomios o casas particulares para llevar la palabra del señor.
Padre Alan Camargo Alanís, vocero de la iglesia católica.
El vocero de la iglesia católica el padre Alan Camargo Alanís, dio a conocer que actualmente es importante seguir alentando y avivando la fe, es por eso por lo que llevan consuelo a las familias que están pasando por situación del COVID-19, asimismo si es requerida la asistencia de un sacerdote estos pueden acudir con las medidas adecuadas para evitar más contagios del mortal virus.
Tenemos formas diversas la cuestión espiritual es una de nuestras prioridades, todo es importante pero también consolar a muchas familias lo dice el evangelio hay que consolar las tristezas y cuando hay una necesidad urgente de alguien que fallece o que está enfermo si acudimos de alguna forma para acudir a las comunidades, indicó.
Por otra parte, el presbítero indicó que el obispo de la diócesis de Matamoros se encuentra preocupado por el índice de contagio qué hay en la localidad y en Reynosa, municipios que liderean las estadísticas de contagio por lo que un equipo de sacerdotes se ha capacitado para alentar la fe aún y cuando sea en nosocomios siempre y cuando se permita el acceso, el equipo tiene conocimiento de los lineamientos para evitar el contagio.
Estamos capacitando a un grupo de sacerdotes que ya tienen la instrucción y los medios para situaciones de enfermos más delicados de COVID-19 y bueno este grupo se ha capacitado sobretodo para atender el tema en Reynosa y Matamoros y bueno con el apoyo de las instituciones de salud se puede hacer con ciertas restricciones una oración más cercana del enfermo y de quienes lo acompañan, concluyó.