Las reglas en cuanto a su buen comportamiento no van a cambiar
El alcalde de Matamoros Mario Alberto López Hernández, negó temer a la demanda que interpusieron algunos migrantes en contra del secretario del ayuntamiento Federico Fernández Morales, ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), ya que aseguró que cada acción que se lleva a cabo en torno a los centroamericanos, es verificada por autoridades federales.
El edil matamorense señaló que si los migrantes se van a quejar de alguna situación, deben contar con las pruebas necesarias para refutar sus acusaciones, que en este caso recaen en una presunta violación a sus Derechos Humanos y una supuesta discriminación por parte de la autoridad local.
Cabe recordar que el zafarrancho que protagonizó el secretario del Ayuntamiento de Matamoros el pasado 17 de enero, comenzó cuando le exigió a los habitantes del campamento migrante que mejoren su compostura y que se pongan a trabajar, acción que no fue bien aceptada por los extranjeros que ocupan la planicie del río Bravo.
López Hernández calificó a esta acción como poco preocupante, puesto que el funcionario público en mención cuenta con un grupo de abogados que al momento se abocan en la respuesta a la CNDH respecto a la queja que tiene en su contra.
El presidente municipal se limitó a decir que el ayuntamiento hace lo propio para que el proceso de la demanda sea culminada, sin embargo, esto no cambia la postura que el ayuntamiento tiene sobre los migrantes, ya que aunque ellos demanden, las reglas y exigencias en cuanto a su buen comportamiento no van a cambiar.