Se cerraron las puertas con el Gobierno de los Estados Unidos
El titular del Instituto Tamaulipeco del Migrante (ITM) en Matamoros, Enrique Maciel, señaló que los 17 migrantes varados en Matamoros que se cruzaron en balsa inflable el río Bravo, corren el riesgo de ser deportados a sus países de origen.
El servidor público señaló que cuando los indocumentados llegan a esta frontera son recibidos por el personal estatal, quienes tienen la obligación de explicarles que si realizan acciones contrarias a las indicaciones de los Estados Unidos van a perder su derecho a una cita.
El empleado estatal dijo que prácticamente los 17 migrantes que se subieron a la balsa para cruzar el río ya se cerraron las puertas con el Gobierno de los Estados Unidos, quien probablemente les impondrá un castigo para negarles definitivamente su acceso a ese país.
Lamentó que la gente insista en cruzar el río Bravo aún después de la muerte de dos integrantes de una familia hondureña, quienes no lograron atravesar las fieras aguas durante su intento por alcanzar el sueño americano.
“Saben que esto es un peligro pero al final de cuentas es una decisión que ellos toman y que nadie los obliga a quedarse. Durante las pláticas que se dan a los migrantes se les informa que no deben intentar cruzar porque pierden todos los derechos y eso es lo que pasó”, dijo.