Se dedican a hacer actos de malabarismo en diversos puntos de esta ciudad
Un niño de 12 años de edad originario del estado de Chiapas que trabaja en el crucero de la calle sexta y la avenida Longoria de Matamoros, pide apoyo a los ciudadanos para comprar zapatos a su medida.
Miguel «N» llegó a esta ciudad hace más de una semana acompañado por sus padres y sus tres hermanos, quienes desde entonces se dedican a hacer actos de malabarismo en diversos puntos de esta ciudad.
Con la mirada perdida sobre el asfalto caliente de la calle sexta, el pequeño Miguel pide el apoyo a los automovilistas que transitan por el crucero para que colaboren con su causa y le ayuden a portar ropa y zapatos a su medida.
El niño aseguró que trabaja una jornada de 12 horas de trabajo y que en ocasiones consigue reunir hasta 500 pesos, lo que no es suficiente para solventar los gastos que se generan para mantener a sus hermanos pequeños.
La talla de su calzado es del 21, pero la necesidad los obligó a ponerse un par de tenis talla 18, lo que le provoca dolor en sus piernas y plantas del pie por todas las horas que pasa trabajando.